Protector solar

Oficialmente ha llegado el verano ¡hasta en Inglaterra! Llevamos unos días muy buenos, con solecito y calor. ¡Hasta hemos puesto una minipiscina en el jardín! Y claro, con el sol y el calor, llega el protector solar. Como buena madre, me paso el día echando crema para el sol a mis pequeñas y ¡oh, sorpresa! resulta que se han llenado de granitos incluso cambiando de marca de  crema.

No es la primera vez que les pasa, al menos a Candela (para Julieta es el primer verano con sol y cremas, el año pasado era tan pequeñita que apenas estuvo al sol). Así que rauda y veloz me he puesto a buscar alternativas. Al final, como no, he decidido hacer mi propio protector solar.

He encontrado varias referencias en cuanto al grado de protección de algunos aceites vegetales que podéis visitar aquí y aquí. y también he buscado qué cantidad de óxido de zinc se necesita para una alta protección, y ese documento lo podéis ver aquí. El óxido de zinc, según la Comisión Europea, "absorbe muy bien la luz ultravioleta (UV) y por eso es apto para su uso en lociones de protección solar, tanto para adultos como para niños".

Está hecho únicamente a base de aceites vegetales, cera de abejas, óxido de zinc y aceite esencial de lavanda. Los aceites están elegidos por su capacidad para bloquear los rayos UV y por su facilidad de absorción. De esta manera conseguimos un protector solar que además de ser resistente al agua se absorbe rápidamente y no deja demasiada sensación grasa.

Investigando por mi foro favorito, me he encontrado esta receta y me ha parecido bastante razonable. Aun así, la he modificado a mi gusto y con los ingredientes que yo tenía en casa. He aumentado la cantidad de óxido de zinc para obtener una protección superior al FPS 30. Aunque deja la piel ligeramente blanca, si la extiendes bien el blanco desaparece y me parecía importante que fuera de un alto grado de protección porque la piel de mis niñas es lo primero.

Ingredientes:

25% óxido de zinc
5% manteca de karité virgen (traída directamente desde Senegal por una amiga)
9% aceite de sésamo
9% aceite de pepitas de uva
10% aceite de avellana
18% oleato de caléndula en aceite de salvado de arroz
10% aceite de cacahuete
10% aceite de coco elaborado por mi
2,5% cera de abeja virgen (obtenida directamente de apicultores ecológicos en el mercado de mi pueblo)
1,5% vitamina E pura
30 gotas de AE de lavanda
5 gotas de AE de lemongrass

Preparación:

Fundir en el microondas todos los aceites salvo los esenciales y la vitamina E. Añadir el óxido de zinc y remover hasta su completa disolución. Dejar templar y añadir la vitamina E y los aceites esenciales. Remover bien, dejar enfriar y envasar. ¡Lista para usar! Eso sí, ya sabéis que los protectores solares no hacen milagros, hay que usarlos con cabeza: aplicarlos unos 20-30 minutos antes de exponerse al sol, re-aplicar con frecuencia y evitar las horas de mayor impacto solar del día (entre las 12 y las 4). ¡Espero que os guste!