Manteca de karité batida

Hoy he tenido un ratito y me he hecho una cremita nueva :) Es manteca de karité batida. Aquí os la presento.

Sólo tiene cuatro ingredientes: manteca de karité, aceite de pepita de uva, vitamina E y aceite esencial de lavanda.

La manteca de karité es súper nutritiva y regenerante y como hidratante corporal, no tiene precio. Además, esta en concreto, me la regalaron recién traída de Senegal y es súper pura y sin refinar. La pega es que huele mucho, y aunque el olor no es desagradable, sí es intenso. Eso sí, con el AE de lavanda se neutraliza bastante.

El aceite de pepita de uva es un aceite de tacto seco, lo que significa que se absorbe rápidamente y no deja sensación de piel grasa. Al absorberse tan rápido ayuda a que las propiedades de la manteca de karité también penetren a capas más profundas de la piel, por lo que se complementan fenomenal. Además es un potente antiarrugas y rico en antioxidantes.

La vitamina E, aparte de conservar los aceites para que no se pongan rancios, es un antioxidante natural que neutraliza los radicales libres, por lo que resulta un buen antienvejecimiento.

El aceite esencial de lavanda es conocido por sus propiedades relajantes y calmantes, pero además es antiséptico, cicatrizante y regenerador.

Total, que con cuatro ingredientes tenemos una crema impresionante para el cuidado de la piel. El efecto sobre ella es alucinante. Con una aplicación diaria, en dos días ya se notan grandes resultados incluso en pieles muy secas (como es mi caso). Sin duda, os la recomiendo.

Además, con este formato de manteca batida obtenemos una especie de mousse que facilita la aplicación (la manteca pura es bastante difícil de extender) y resulta muy agradable. Lo malo es que, al no llevar agua, es una crema bastante densa y por eso os recomiendo usarla de noche.

También se puede aplicar en el pelo a modo de mascarilla. Se extiende sobre las puntas y se deja actuar 10-15 minutos. Luego, lavar el pelo de forma regular para retirarla. El pelo se nutrirá en profundidad y quedará suave y sedoso.

Ingredientes:

- 140g manteca de karité
- 60g aceite de pepita de uva
- 2g vitamina E
- 26 gotas de aceite esencial de lavanda

Preparación:

Poner la mariposa en la thermomix, echar la manteca y programar sin temperatura 2 minutos a velocidad 3. Pasado el tiempo, volver a poner en marcha la thermomix a velocidad 3 ir añadiendo el aceite por el vocal. Seguir batiendo un minuto más hasta que esté bien montado. Añadir la vitamina E y el aceite esencial y batir un poco más. Al batir la manteca se calienta y se derrite ligeramente. Por ello es recomendable apagar la thermomix un rato (una media hora o una hora) para que se vuelva a enfriar y pasado el tiempo batir unos segundos de nuevo para conseguir una textura parecida a la nata montada (algo más ligera), aunque supongo que este paso se podría omitir si tenéis mucha prisa. Envasar y listo.

Al dejarla reposar una vez envasada se endurece ligeramente, pero sigue manteniendo la textura de mousse, no os preocupéis.

Yo la he preparado en la thermomix, pero, según he leído por ahí se podría hacer igual con cualquier batidora de varillas aunque no os puedo decir el procedimiento exacto puesto que yo no he probado.